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Cada mañana que te vas
Publicado por
María García Esperón
miércoles, 29 de septiembre de 2010
Cada mañana que te vas no te das cuenta
cuando mi cuerpo dice adiós sin inmutarse
es por la máscara, no adviertes
que mis ojos desesperan tu regreso.
Mientras te arreglas no te miro;
hago café pensando si lo habrás notado
pues cada mañana que te vas, entre tus cosas,
llevas también mi corazón.
¡No me extorsiones primavera!
Publicado por
María García Esperón
sábado, 25 de septiembre de 2010
¡No me extorsiones primavera!
Con tus pájaros y flores
tu alegría
¡Tus amores!
Obligado, no quiero ser feliz
ni reír ni saludar
a tus bellezas.
Porque soy torcido como un tallo
torcido.
Quizás, en una de esas
al ser tan elocuente
me convenzas
y sonría
Pero...
¡no me extorsiones primavera!
Que los días de lluvia
también me gustan.
Ración
Publicado por
María García Esperón
viernes, 24 de septiembre de 2010
Como el preso de una comida diaria
estoy esperando mi ración.
Ansioso, con agua en la boca
con la memoria llena
de manjares compartidos
que ahora parecen tan lejanos
pero con la ilusión intacta
te decía que estoy esperando
mi ración
de ti.
Sangre
Publicado por
María García Esperón
martes, 21 de septiembre de 2010
En el Mayor Momento de la fe cristiana
ha sido siempre hermanada con el vino.
La Cena en cruz se trocará mañana
para cumplir así nuestro feliz destino.
Metáfora que mezcla la espina con la rosa
en toda historia es prédica que cunde;
que sabe a dulce la daga silenciosa
en el postrero instante en que fatal se hunde.
Yo admiro la bebida del festejo
de los amigos, la risa, la alegría.
Rival eterno de la sangre derramada
el vino tinto y fuerte de la vida.
No escribo
Publicado por
María García Esperón
sábado, 18 de septiembre de 2010
No escribo para desahogarme.
No escribo porque estoy solo.
No escribo porque estoy triste.
No escribo para enamorar.
No escribo para hacer reír.
No escribo para agradar.
No escribo por todo lo contrario.
En realidad no sé bien por qué escribo.
Tampoco sé bien por qué respiro.
Y sin embargo eso nadie me lo pregunta.
Heartbeats
Publicado por
María García Esperón
jueves, 16 de septiembre de 2010
El viento golpea duro en la cara
y moja el alma.
Nadie podría caminar en una tarde como esta.
Nadie en su sano juicio.
Nadie camina en un día de lluvia
y viento
sin saber adónde va
a menos que esté loco
o perdido.
Eso me digo yo
que estoy cuerdo
mientras apuro el paso
buscando adónde ir.
Sures
Publicado por
María García Esperón
martes, 14 de septiembre de 2010
Para mí el sur es una raya
que va de Buenos Aires a Santiago.
Llega hasta la Patagonia y calla
surcando mil desiertos despiadados.
También el sur del uruguayo
(ese que existe, nosotros lo habitamos)
o el del poeta ciego
con gauchos y paisanos.
Es Camino del Sur
que invita a ir Sureando
silbando mil canciones
que para mí son tangos.
¿Qué sur de todos esos sures
es el que yo más amo?
Seguro que el de Manzi,
con Manoblanca al lado.
El sur de las estrellas
el sur de aquellos ojos
que sueñan en Pompeya
esperándome.
Menárdez
¿Para cuándo el amor?
Ese de la calle Honduras
El que vence al olvido
Y deja el alma
al revés
¡Pobre poeta sin amor!
Tal vez cruzando aquella esquina
Se rinda frente a ti
la suerte esquiva
por una vez
Un round más
Publicado por
María García Esperón
Ya sé que estás exhausto
Que no sentís las piernas
Que estás mareado
Que te falta el aire
Y que tenés ganas de llorar de dolor.
Y yo que estoy afuera
En tu rincón
Sólo puedo hablarte
Y en un minuto curarte las heridas.
Sólo para que vayas de vuelta;
A dar y a recibir.
Un round más
Sólo eso te pido
No que ganes
Un round más.
Respirá profundo
Abrí bien los ojos
Movete por el ring
No te quedes quieto.
Subí la guardia!
Que si bajás los brazos
La vida te mata
¡Usá tu derecha!
Yo sé lo que querés
Que te tire la toalla
Pero no hay toalla en tu rincón.
¡No la hay!
Son sólo tres minutos,nada más
Que parecen eternos
Cuando estás golpeado y solo
Contra las cuerdas.
Pero no hay toalla en el rincón
¡No la hay!
No te queda otra
Usá tu derecha
Abrí bien los ojos
Movete
Y salí de nuevo
Un round más.
Poesía imperfecta
Publicado por
María García Esperón
Poesía torpe de mi amor irregular
plagado de defectos, de recortes,
de intentonas
que llega sin saber adonde va.
¿Adónde irá pues este amor?
Con ansias de salir maravilloso.
Pero es rudimentario y con hilvanes
y su poesía, tan imperfecta como yo.
Monte vide eu
Publicado por
María García Esperón
Montevideo es porteño
todo es bueno y de lo malo
no me acuerdo, es como acá
sólo que más pequeño.
Tiene mercado en el puerto
en la ciudad vieja, arrabal.
Tiene Pocitos, llamadas
cuando llega el carnaval.
Te pelean por Gardel
su lugar de nacimiento
mas eso es con sentimiento
con respeto, es un placer
llegar a Montevideo
donde hay negros con tambores
comer asado con ellos
al compás de algún candombe.
Y luego volver a casa
por ese río marrón
que lo llamamos del plata
y descubrió un español
¡Hace tantos, tantos años!
Dice el libro
qué se yo.
El pájaro
Publicado por
María García Esperón
El amor es un pájaro
Que se posa en nuestra ventana
una mañana de otoño
Primero no lo vemos
O pensamos que volará de inmediato
Sin embargo se queda
todas las mañanas de ese otoño tibio
Y nos hace felices
como nunca imaginamos
Lo alimentamos
Y él canta
Pero luego dejamos
de asomarnos a la ventana
Porque su canto llega
hasta adentro de la casa
Y a veces nos olvidamos de alimentarlo
O tal vez al pájaro
ya no le gusta nuestra comida
Y un buen día se echa a volar
No nos damos cuenta enseguida
Porque ya es primavera
y muchos pájaros cantan
Entonces corremos hasta nuestra ventana
Y tan misteriosamente como llegó
En aquel otoño, ahora mítico
Se va
Y esta primavera se nos vuelve fría
No es culpa de nadie
Así es la naturaleza de cambiante
Tal vez si tenemos suerte
Algún día
Escuchemos otro canto
En nuestra ventana.
Pero ahora no podemos pensar en eso
Ahora sólo podemos pensar
En aquel otoño tibio
En que el pájaro frágil y sonriente
Se posó en nuestra ventana
Por primera vez.
El espejo roto
Publicado por
María García Esperón
Cuando oí el estrépito del espejo desplomándose en el suelo, lo primero que pensé fue en mi proverbial torpeza y luego, por supuesto, en los siete años de mala suerte. Lo que nunca imaginé es que detrás del espejo pudiera haber un túnel, y que en la siguiente ocasión que tuviera para reflexionar -es el momento en que esto escribo- me encontrara al final del corredor, viendo cómo una persona, que parezco ser yo, pero más vieja, escribe una carta a la luz de una vela, con la esperanza de que alguien lo saque de allí.
Borde
Publicado por
María García Esperón
Es raro este amor que se me escapa
como una peli al borde del abismo
Él la sujeta mas ella se resbala
y no hay quien pueda remediarlo.
Así aparece a veces este amor
que se sostiene apenas con un dedo
con una mano temblorosa que se escurre
hacia el vacío infinito del adiós.
Cinco minutos
Publicado por
María García Esperón
El reloj dice que faltan cinco minutos
para levantarse de la cama
o para entrar al trabajo
para seguir en la playa
o para que empiece la función.
Cinco minutos para tomarse la última cerveza
para dar y recibir besos.
Quizás en realidad faltan cinco minutos para
morir
o por vivir.
Eso no lo sabemos.
Lo que me resulta curioso
es que vivimos como si tuviéramos
cinco siglos por delante.
Mi fe
Publicado por
María García Esperón
Quién te dice si soñar
a lo mejor
no es tan difícil.
¡Y hace bien!
Porque seguro
es necesario
como el pan
como tu luz
como mi fe.
Aunque trabajes en un banco
soñate un mundo entero
de gente que se ríe
y que se besa por las calles.
Estoy seguro que mañana
será distinto.
Impaciencia
Publicado por
María García Esperón
El cielo puede esperar
las hipotecas subprime
la quiebra de los bancos
Obama y Mc Cain
la Bolsa
el partido de fútbol
mi camisa arrugada
la hora de la fiesta
la oferta de fin de temporada
la primavera
el amigo
la impaciencia.
Lo que no puede esperar
es el deseo.
Uno (otoñal)
Publicado por
María García Esperón
Seguramente es el otoño que llegó/ con su frío
de árboles marrones
y lloviznas
repartiendo melancolías.
Pero uno que va de contramano
por las calles de la vida,
arranca el día alegre
con vientos en la cara
revuelta de hojas secas
tomando mate mientras la vida pasa
en la sonrisa de una niña.
Uno se pregunta por qué será
que siempre estamos esperando
mil mañanas;
que vuelva el calor,
que llegue el viernes.
Y sin embargo ahora hay una fiesta
de grises y marrones
(también amarillos)
en el cielo y en la tierra
que nadie parece agradecer.
Excepto uno que va de contramano
por las calles de la vida y espera
que lleguen otros invitados
a esta fiesta otoñal
que es suave y sutil
como la vida a veces.
El alma de las cosas
Publicado por
María García Esperón
Quizás buscamos sin saber lo que no existe;
dentro del pecho, detrás de tu mirada.
Tal vez debiéramos dejar que nuestro cuerpo
sea sólo eso, la mejor de las moradas.
¿No será en otro lugar donde ella vive?
(en una carta, en un café o en una rosa)
¡oh geografía equivocada del poeta!
no es en el cuerpo donde hay alma
es en las cosas.
Testamento
Publicado por
María García Esperón
Me preguntan cómo me gustaría
que me recuerde mi hija mañana.
Como a todos, que su padre fue un buen hombre.
Que con errores, luchó para que la vida
la dañe lo menos posible. Que la amó.
Que le enseñó algunas cosas.
Pero esos deseos los tenemos todos los padres.
Mi sueño particular es que un día, revisando
trastos en desuso
ella encuentre uno con forma
de poesía imperfecta
y se diga que su viejo
no lo hacía tan mal.
Caballos salvajes
Publicado por
María García Esperón
Sueño con caballos salvajes
paciendo por los llanos
del norte o del oeste
de la tierra sin alambres;
sin monturas sin aperos
sin jinetes
ni desfiles militares.
Dueños de su tiempo
orgullosos invictos
sin carreras sin espuelas.
Detrás de las pupilas apagadas
del caballo viejo
que recoge las miserias
frente al carro del paupérrimo
veo el alma victoriosa
que resiste que recuerda
los inmemoriales tiempos
no vividos
de la libertad.